sábado, 20 de junio de 2015

Sabias desiciones

Ya pasaron 6 meses -y 3 días- desde que me fui a Santiago el año pasado... fueron unas vacaciones muy diferentes a las de años anteriores, sentía que había perdido a mi mejor amigo, por lo que no tenía muchas ganas de ir hasta su casa por cosas que no van al caso en este minuto.
Por otro lado, aunque me dolía, no sabes como, necesitaba dar un paso al costado en lo que había sido la relación más larga en mi vida. Sentía que estaba dejando ir al amor de mi vida por la razón más triste de todas, él ya no me amaba y lo refregaba en mi cara con cada actitud y cada respiro que daba en lo que era en ese momento "nuestro hogar".
El último tiempo había estado repleto de altos y bajos, de desencuentros y por supuesto, dolía, dolía cada vez más, ciertamente se esforzó en dejar claro su posición y no me quedo de otra que guardar mis lágrimas para que no las viera... aún recuerdo sus frases, las excusas que dio de porque seguía ahí, porque no simplemente se iba... eran bastante distantes a que aún sintiera algo por mi.. quizás entre lineas podría haber habido algo así como remordimiento, por haber forzado las cosas hasta ese punto donde se suponía que yo era ahora dependiente de él, o quizás algo de afecto, después de todo este tiempo juntos le hizo no abandonarme en medio de la nada... "no me ido porque no eres capaz de pagar esto tú sola", entre otras...
Incluso ese día -hace 6 meses y 4 días- me costo mucho esbozar las palabras para darle fin a todo esto, por primera vez lo hacía yo y por única vez él tendría que asumir que era real.
Durante las vacaciones recibí llamadas y mensajes de todo tipo, que paga tú, que pago yo, que me voy mañana, que no me voy hasta marzo, que venderé todo para poder irme, que no venderé nada y me llevaré sólo mi ropa, después de que no quería verme hasta marzo incluso me pidió que viajará para pasar días juntos.. nada de lo que decía era confiable, más bien parecía un juego de niños con el que se llevaba la poca paz interior que lograba encontrar en casa de mi familia.
Mi familia.. mi familia sólo supo lo que estaba pasando después de una de esas llamadas, él no pensaba pagar el arriendo porque se iría y eso me dejaba en la posición más incomoda de todas, tenía que parir 150 mil pesos para el día siguiente o perdería el lugar en donde estaban mis cosas, adonde pensaba llegar cuando comenzará el año universitario, a 850km de donde me encontraba en ese momento. Les pedí que se sentarán conmigo un momento, les dije que necesita contarles algo y con un nudo en la garganta comencé con la historia que me había guardado para mi sola casi un mes.
Hubieron muchas conversaciones después de aquella, noches completas que pase con mi hermano e innumerables ocasiones en las que mi madre pregunto si estaba segura de mi decisión o si daría pie atrás, mi padre, mi abuela... hasta la pequeña Isi se acercó a conversar conmigo...

En Marzo prometí quedarme hasta la feria en la que participaba Neko.. así que tome pasajes para el día siguiente de esta y a pesar de que mi intuición me decía que ahí estaría él, tenía curiosidad sobre que pasaría si nos encontrábamos en un lugar neutro después de esos meses.. así fue, ahí estaba, frío y distante como si no me conociera, se sintieron largos los minutos que trascurrieron hasta que nuestras miradas se toparon y mi necesidad de mirar otra cosa fue inmediata, se cruzaron un par de palabras y al momento de irnos mi necesidad de no pasar otro minuto cerca de él me hizo despedirme de ambos en la puerta para luego caminar en otra dirección... mientras lo hacía respiraba profundo, mi corazón se aceleraba cada vez más y me costaba no correr, miraba todo a mi alrededor e incluso hacía atrás.. por si venia tras de mi, claro que no lo hizo.
Ese día y otras varias cosas han confirmado que hice lo correcto y que a quién extraño a menudo es sólo alguien que ya no existe.
Aquella noche era la última en Santiago, así que decidí cerrar el ciclo e ir a carretiar con mi hermano, pase mi último día en familia y luego tome el bus de vuelta a Valdivia.. con mis únicas compañeras de siempre... la ventana, las estrellas y una hermosa luna.
Llegar al departamento fue difícil, la luz estaba cortada, la casa hecha un desastre, calcetines colgados en las sillas, ropa y basura tiradas por todos lados, la caja del gato en la pieza aún con arena usada en su interior y cosas suyas por todos lados... en arreglar el cuento de la luz se fue la mañana y el dinero que traía conmigo, luego, pedir ayuda a mis amistades valdivianas para que al menos una viniera a darme apoyo emocional mientras le devolvía la vida al depto, la única que se encontraba en Valdivia llego incluso con comida.. -sos un sol Cristi- era lo primero que comía en todo el día, luego me ayudo con la limpieza, el orden, la reorganización e incluso a cambiar la cama de posición... quedo mucho mejor por cierto.
Han pasado muchas cosas estos meses, murió la lavadora, así que volví a mandar la ropa a la lavandería, me prestaron un frigobar, en Abril vino mi madre e Isi a verme y por esas cosas de la vida termine adoptando una gatita, París, mi gran compañía hasta el momento. Poco antes de eso supe del embarazo de Naomi.. su hijo ya tiene 16 días de nacido. Cambie la totalidad de la ropa de cama, los cubiertos, los tazones, los paños de loza, ahora hay manteles para la mesa, finalmente compre los tubos que hacían falta para colgar los visillos y también una estufa, vendí su bici e intento darle un uso productivo a la guitarra, me regalaron una aspiradora para que no vuelva a quedar con dolor de espalda por barrer la alfombra... le he dedicado todo el tiempo que he podido a mis amigos y mi casa se convirtió en un refugió para ellos mismos, donde pueden llegar a conversar, desahogarse, tocar guitarra, comer, beber, estudiar, ver películas o lo que sea, reforzando amistades que ya estaban y creando nuevos y lindos lazos con personas que aparecieron al paso... y poco a poco le he ido dejando atrás, facebook, instagram, twitter, lastfm, tumblr, la carpeta compartida de dropbox, whatsapp, su número de celular.. y hace pocos minutos cuando me encontraba divagando por su blogger decidí que ya era tiempo de quitarlo también.. en el encontré infinidad de "cartas" dedicadas a mi persona, todas ellas del hombre enamorado que existió hace unos años atrás.. entré ellas esta frase:

"Al menos tienes claro que quiero llegar a tu corazón una vez mas."

y maldición que lo lograste. Para qué? aún no lo entiendo, ni lo haré, pues incluso ya deje de cuestionarmelo.

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